Gazpacho casero de lichis

Una buena forma de aprovechar estos (esperamos) últimos días de calor, ya entrado el otoño, es este gazpacho casero de lichis, muy refrescante, delicioso y nutritivo. Todos sabemos que el gazpacho es andaluz, y que se hace con tomate. Pero esto es históricamente reciente (se le agregó tomate en el siglo XIX), pues siglos antes los campesinos, como un tentempié en medio de la jornada, majaban pan con vinagre, aceite y ajo, y algunas hortalizas de temporada trituradas con las manos, y se lo bebían.

Por ello, hay quienes piensan que el ajoblanco y el salmorejo son versiones distantes del gazpacho. Cuando se le añadió tomate comenzó la era de las variantes rojas del gazpacho, ya que el tomate le da ese color tan hermoso y atractivo a la conocida sopa fría. Sin embargo, como todo, ha sufrido cambios y experimentado transformaciones a lo largo de la historia.

Hoy en día, hay una gran cantidad de variedades, tanto frías como calientes (más característicos de La Mancha), lo que le aporta a esta sopa una gran versatilidad. A decir verdad, el gazpacho puede prepararse con frutas, verduras (que son los ingredientes usuales), pero también se les puede agregar, por ejemplo, frutos secos (como almendras o nueces), lo cual le dará un sabor espectacular, que bien recordará al ajoblanco. Por supuesto, los toppings le darán el toque final y perfecto, por ello no es un detalle para dejarlo al azar. Se pueden utilizar hortalizas crudas cortadas en cuadraditos, los tradicionales picatostes de pan, nueces troceadas, un puñadito de pipas o un chorrito de nata o de AOVE. La imaginación es el límite.

Ingredientes:

Cómo preparar un gazpacho casero de lichis:

1. Lavar y pelar el pepino, cortarlo longitudinalmente y sacarle las semillas.
2. Cortarlo en trozos, que llene 2 tazas.
3. Abrir la lata de lichis, desechar el almíbar y enjuagar un poco los lichis, para quitarles el exceso de dulce. Hacerlo 2 o 3 veces.
4. En la licuadora o en un procesador, poner el pepino, los lichis, las almendras, el cilantro, la menta, el yogur, sal y pimienta (al gusto).
5. Triturar hasta obtener una crema. Rectificar de sal y pimienta, si fuese necesario.
6. Pasarlo a una fuente y meter a la nevera, hasta que se enfríe bien.

Sirve este gazpacho casero de lichis en cuencos, tazas o vasitos. Puedes ponerle por encima picatostes y trocitos de queso feta, además de un chorrito de aceite de oliva. Si te ha parecido interesante este gazpacho casero de lichis, no dejes de compartirlo con tus amigos y contactos, en foros y redes sociales.